Las diferentes investigaciones han demostrado que existe una relación entre los padres con historial psiquiátrico de tener el riesgo de que un hijo sea autista.
Los investigadores del Mount Sinai Hospital de Nueva York, encontraron que las personas que sufren esquizofrenia elevan en tres veces la posibilidad de tener un niño con autismo. De una forma similar, también con las personas que sufren de desorden bipolar, pero en un menor grado. Estos factores de riesgo potenciales pueden ser genéticos o por el ambiente.
La revista American Journal of Epidemiology clasifico los siguientes desórdenes de mayor a menor severidad de las siguientes patologías: esquizofrenia, desorden afectivo, abuso de sustancias y otros desordenes mentales.
Un estudio publicado recientemente en el The Journal of Child Psychology and Pychiatry concluyó: «Padres de niños autistas, especialmente el padre, fueron significativamente diagnósticados con algún tipo de esquizofrenia».