Esta conducta se puede observar al estudiar y en otras actividades. Cuando esto ocurre, el niño o la niña asumen una actitud pasiva y esperan que usted le resuelva asuntos que a ellos les toca resolver. Reflexione sobre su propia conducta hacia el niño o la niña. ¿Sobreproteje usted u otros miembros de la familia a los niños o les facilita hacer todas las cosas?. Si este fuera el caso, es necesario revisar este estilo de crianza. Al momento de estudiar, una vez ayude al niño o la niña a organizarse, retire su presencia gradualmente, pero en forma progresiva. Dé tareas breves donde el niño trabaje solo. Poco a poco, aumente el tiempo de trabajo individual. Si es necesario obtenga algún tipo de orientación profesional.